La teoría crítica surgió en el Instituto de Investigaciones Sociales de Frankfurt, en 1923. El trabajo de esta corriente analizó el efecto de la cultura de masas en el pensamiento de las sociedades modernas. Busca desarrollar una teoría social materialista que, aplicando investigaciones sociales empíricas, basadas en un análisis objetivo de los datos, pero desde un punto de vista crítico, permitiera realizar análisis profundos y globales de las condiciones de vida económicas, políticas y sociales existentes.
A los teóricos críticos, les preocupó el surgimiento del “hombre masa”, es decir, un sujeto subordinado a las innovaciones tecnológicas y los medios de comunicación, en donde se transmiten modelos y estereotipos de comportamientos de acuerdo a los intereses de los consorcios capitalistas.
En las sociedades modernas, apunta esta postura, las personas adoptan los valores y hábitos expuestos en los medios masivos de comunicación y esto es aprovechado por los productores de bienes para exponer su producto y transformar los hábitos de consumo, lo que refuerza el poder en el orden establecido.
Su antecedente se da con el Instituto para la Investigación Social creado en Alemania, donde trabajaban destacados intelectuales, la primer escuela fue fundada por Theodor Adorno, Max Horkheimer y Herber Marcuse, quienes juntos, desarrollan la llamada Teoría Crítica, a fin de analizar críticamente, tanto el autoritarismo fascista alemán como el soviético.
Los principales protagonistas de esta escuela son: Jürgen Habermas, Theodor Adorno, Herber Marcuse y Max Horheimer, todos judíos que vivieron durante la Segunda Guerra Mundial en la Alemania nazi, razón por lo cual, tienen que abandonar el país, huyendo del nazismo y estableciéndose en Estados Unidos (primero en Nueva York y posteriormente en California), una vez finalizada la Guerra Mundial (finales de 1949), algunos vuelven a Frankfurt como Adorno y Horkheimer, donde el primero, asume el cargo de director del Instituto para la Investigación Social, reviviendo nuevamente la Escuela de Frankfurt de la Teoría Crítica.
Promotores de la Escuela Critica y propuestas
Jurgen Habermas
Filósofo y sociólogo alemán, conocido por sus trabajos en Filosofía práctica (Ética, Filosofía política y Derecho). Es el miembro más eminente de la segunda generación de la Escuela de Frankfurt, entre sus aportaciones está la construcción teórica de la democracia deliberativa y la acción comunicativa.
La propuesta de Habermas es la emancipación del hombre mediante la reflexión, para acabar con todo aquello que nos mantiene oprimidos. Habermas, destaca que los sujetos poseen capacidades de comunicación, de reflexión y de análisis antes de actuar, ya que son capaces de argumentar y de establecer acuerdos razonados, que les permitirán la sana convivencia con los demás.
Si en Carlos Marx los factores materiales como el trabajo y la supervivencia eran parte de la explicacion de la historia humana, de tal modo que la explica con base en los modos de producción social, Habermas por su parte retoma la importancia del papel de otros factores sociales, como la comunicacion. Sin comunicacion, afirma, no hay posibilidad de formar grupos, ni trabajar en sociedad. La comunicacion es tan importante para la supervivencia como la producción social.
Para Habermas, las acciones de las personas y grupos sociales no son suficientemente explicadas por los factores materiales, sino que están sustentadas en la comunicacion. La acción comunicativa es la acción fundamental de la vida social; sin ella no hay trabajo, grupos ni organizacion social. En la historia social, la acción comunicativa entre las personas puede ser independiente, y libre y racional; independiente de los factores que la deforman y limitan, como los intereses del dinero y el poder que limitan la comunicacion veraz; libre de prejuicios de todo tipo, de ocultamientos y mentiras, para establecer verdaderos mensajes que permitan conocer situaciones reales y promover acciones de bienestar eficaces y racionales porque una efectiva comunicacion requiere estar sustentada no solo en datos sustentados, sino en un espiritu critico que permita generar mejores formas de vida e interacción personal.
En la sociedad quedan pocos espacios para resistir esta tendencia colonizadora del dinero y el poder. A los espacios que se resisten a funcionar con esta logica Habermas les llama "el mundo de vida", en el sentido de que ahí se depositan acciones comunicativas, códigos culturales y criterios de comportamientos que no siguen la logica del dinero y el poder, que tienen concepciones de la vida distintas, con una cultura y ética que disminuyen o anulan el peso de los criterios mercantiles. Y en este "mundo de vida", los lugares clave de su reproducción son los espacios publicos, ese mundo de pequeños lugares en las universidades, clubes, cafe, restaurantes, etc., donde se analizan y debaten libremente los temas que preocupan a los grupos sociales y a las personas.
La sociedad es definida del siguiente modo por la teoría critica: La sociedad es el "mundo de vida" en el cual las acciones comunicativas orientan a los grupos, movimientos sociales e individuos hacia una comunicacion libre y racional, que luchan y se resisten a la acción mercantil y de poder.
En esta perspectiva, ¿como se da la relación entre sociedad e individuo?
- Se sigue reinvindicando el espacio individual, pues así como la acción social se expresaba en la búsqueda del espacio vivencial, en la acción comunicativa puede lograrse reafirmando la ética y la acción comunicativa puede lograrse reafirmando la ética y la acción comunicativa del individuo.
- El individuo es un actor que puede defender la razón, la verdad y la critica sustentanda, luchando en su espacio contra el conocimiento fragmentado o contra la mentira y la opacidad.
- El individuo puede encontrar su reafirmacion mediante la lucha por establecer o defender espacios publicos en los que se dialogue en busca de la verdad, y creando una cultura del debate real y a fondo de los problemas sociales y personales.
- El individuo es un actor; las minorías también lo son, y estas pueden convertirse en mayorías, pero donde haya mayorías mecanizadas, sino de calidad, mayorías que efectivamente tiene razón, en las cuales hay pluralidad, debates, distintos grupos que miran a fondo los problemas y los debates, no mayorías homogeneas donde todos piensan igual. En las mayorías plurales hay debates; en las mayorías simples, solo pensamiento unico.
- Si en Marx el sujeto del cambio era la clase obrera, en Durkheim las instituciones y en Weber la acción social, en Habermas lo son la acción comunicativa del individuo y de los grupos minoritarios. Se rescata en la perpectiva materialista el papel del individuo y su papel critico.
Desde esta perspectiva, en la teoria critica se define y revalora el individuo, pudiendo definirse asi:
El individuo es un actor social que afirma mediante la ética y sus acciones comunicativas independientes, libres y racionales, en los espacios publicos que sustentan el "mundo de vida".
Theodor W. Adorno
Filósofo alemán que escribió sobre Sociología, Psicología y Musicología. Es considerado uno de los máximos representantes de esta escuela de inspiración marxista. Su filosofía, continuó en la línea de un análisis del racionalismo como instrumento a la vez de libertad y de dominio, y de una crítica de la sociedad capitalista como restricción de las formas de pensamiento y acción.
Consideraba que las masas mediáticas, actuando como masa, carecen de conciencia clara, pues se adaptan a los hábitos de consumo cotidiano en las grandes aglomeraciones urbanas.
Para Adorno como Marcuse y el propio Horkheimer, es importante dar cuenta de las consecuencias sociales del capitalismo, de los efectos de la lógica del mercado en la vida de las personas: la sociedad queda reducida solo a ser un objeto de consumo donde el sujeto permanece permanentemente controlado, sin ser capaz de reflexionar por si mismo, y preso de las redes de consumo.
Este hecho, que Adorno observa desde los inicios del siglo xx, es un problema de actualidad. Tan solo piensa en los efectos que producen las campañas de publicidad en los medios de comunicacion, al presentarte por ejemplo un refresco de cola como el unico capaz de quitarte la sed. O el caso de la bulimia en niveles cada vez mayores de poblacion infantil, donde las niñas y adolescentes, como producto de los estandares de belleza, al querer verse como modelos tienden a dejar de comer para no verse obesas.
Herbert Marcuse
Su propuesta fue un gran aporte teórico para la emergencia de los movimientos juveniles de protesta, como el movimiento “hippie”. Sus críticas a la sociedad capitalista (especialmente en su síntesis de Marx y Freud, Eros y Civilización, publicado en 1955, y su libro El hombre unidimensional, publicado en 1964) resonaron con las preocupaciones del movimiento izquierdista estudiantil de los 60, fue conocido como: «El padre de la Nueva Izquierda» (término que él rechazaba).La crítica fundamental que realiza Marcuse de la sociedad moderna, donde es el sujeto unidimensional, es víctima de su propia impotencia y de la opresión continua de un método de dominación complicado. Para él, la sociedad moderna es capaz de asimilar cualquier forma de oposición, que surja al interior de sí misma, y por tanto no existe ningún movimiento individual ni colectivo capaz de oponérsele o quebrantar sus raíces socioeconómicas, el contenido de la conciencia humana ha sido disfrazado y las necesidades del hombre son ficticias, producto mismo, de la sociedad industrial moderna.
En este contexto, Marcuse distingue entre las necesidades reales (las que provienen de la naturaleza misma del hombre) y las necesidades ficticias (aquellas que provienen de la conciencia alienada, y son producidas por la sociedad industrial). Sin embargo, como la misma conciencia está alienada, el hombre no puede realizar la distinción. La principal necesidad real que Marcuse descubre es la libertad, entendida como el instinto no enaltecido o exaltado. Marcuse muestra un análisis muy profundo en cuanto a los procesos de cambio, a pesar de eso reconoce “la posibilidad de alternativas” y los diferentes caminos. Una nota al pie muy curiosa de El hombre unidimensional dice: “Todavía existe el legendario héroe revolucionario que puede derrotar incluso a la televisión y a la prensa: Su mundo es el de los países ‘subdesarrollados’. La pretensión de hacer posible el distanciamiento, a través del arte para evitar la dominación, muestra claramente un problema que impide utilizarlo como medio de evasión. Para Marcuse, el arte es capaz de sacarnos de la vida diaria, hacernos ver la realidad de otra forma; sin embargo, el arte está distanciado, pero no separado de la realidad porque está mercantilizado y no puede ser utilizado como medio de evasión porque está bajo el control de la clase dominante, como el resto de los ámbitos de la sociedad.
Max Horkheimer
Filósofo alemán, nació en Frankfurt, en 1895. Estudió Psicología y Filosofía en las Universidades de Munich, Friburgo y Frankfurt. Sus obras más importantes incluyen: Teoría crítica, El eclipse de la razón (1947) y, en colaboración con Theodor Adorno, Dialéctica de la Ilustración (1947). A través de la Escuela de Frankfurt, Horkheimer colaboró y llevó a cabo otros trabajos significativos.
En 1940, recibió la ciudadanía estadounidense y se mudó a California, donde su colaboración con Adorno produjo Dialéctica de la Ilustración. En 1949, regresó a Frankfurt. Entre 1951 y 1953, fue rector de la Universidad de Frankfurt. Continuó enseñando en dicha universidad hasta su retiro a mediados de los años sesentas. Entre 1954 y 1959, regresó a Estados Unidos para dar clases en la Universidad de Chicago.
Estudio la razón instrumental en la sociedad capitalista y la moral como un espacio de crítica y una fuente de cambio social. Considera que la teoría tradicional por excelencia es el positivismo, la cual se ha encargado de convertir la razón como pensamiento crítico, en una razón instrumental. La razón como simple instrumento pierde su carácter crítico y esto ha dado pie a la sociedad tecnificada, acrítica. Busca desentrañar la sociedad alienante.
Para la Escuela de Frankfurt es posible mejorar las condiciones de vida de la sociedad, para ello hay que estudiar los efectos del cambio social y la manera como la acción social es capaz de propiciarlo sin utilizar la violencia. Creen firmemente que las Ciencias Sociales deben pronunciarse en favor de nuevas formas de convivencia social que posibiliten el progreso y la libertad de todos los seres humanos. Por ello, los puntos centrales de la Teoría Crítica se resumen de la siguiente manera:
- Recuperar la importancia individual del hombre.
- Ve al hombre como responsable del cambio social.
- Se opone a la propuesta marxista de que el hombre esta condicionado y determinado por la estructura social.
- Denuncia al capitalismo moderno que manipula y explota a la clase trabajadora.
- Plantea la posibilidad de que pueda haber consenso, apoyo y comprension entre diferentes sujetos y grupos sociales.